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Poema de agua que se mece
con el viento delicado
como una hoja entre las olas
espuma dibujando la risa
del crepúsculo. Anochece
con estrellas sonrientes
un poco al alma que la adora.
Es este el cielo, el surco
amor que quiere crecer. Decrece
lentamente, enamorado
entre suspiros de nácar. Auroras
desgranar de trinos
sin sueños. Desvelos que asolan.
¿Dónde Estás? Po r qué eres
Arena se cierne entre los dedos
diminutos luceros, esencia
como la vida. Imparable tiempo
sublevación de espumas
sumerge en ansiedad. No vuela
el cielo. La lluvia amor, es
esperanza terca -aunque resida
en el arroyuelo de luz,
ese fanal augusto sin memoria-
¿Por qué has de alojarte
Melancolía. Saudade. Magua.
en la esquina del corazón?
Esa tristeza infinita
asentada en la lengua
que sólo se puede expresar
caminando las estrellas
con versos y algo de belleza
vibrando entre tus ojos
-aunque lacere la entraña
estará palpitando
hasta saciarla de dolor-
Nieves Mª Merino Guerra – Nimar
Antonio Escobar Mendívez
17-09-2013
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Está la mañana alegre,
con su traje de colores;
en el verdor de los campos,
y en la fragancia, en las flores;
en el sol que resplandece,
en todos arrobadores,
en las cumbres de los cerros,
y en los rostros de los hombres...
La mañana está de fiesta.
Luce de blanco el jazmín.
Las azucenas se empolvan
con el rocío la nariz.
El sol deja en sus mejillas
tonos de luz y colores.
¡Mira , ya se acicalan
al alba todas las flores!.
Está la mañana alegre,
risueña en los ruiseñores;
fresquita en los tulipanes,
doradas en los corazones;
suave el murmullo del viento,
va besando los balcones,
y en las orillas del río,
están danzando las flores...
Sigue feliz la mañana
con canarios y jilgueros.
Refresca la lluvia tenue
en el corazón eterno
donde los amores sueñan
junto al susurrar del viento.
Y en las ventanas abiertas
Se oye una canción del mar
Que dice ¡vamos a amar!
Está la mañana alegre,
Muéstranse alegres las flores;
si parece que sonríen,
en su gama de colores:
pajarillos, con sus trinos,
y en sus voces multiformes,
van regando el verde campo,
con sus mejores canciones...
La mañana está feliz
con la aurora en su regazo.
¡Ya llega la primavera!
Va verdeando los campos
estallando en armonía.
Nuevas flores cada día
conjugan belleza, encanto.
Raúl Ramírez Soto
Nieves Mª Merino Guerra - Nimar
18-09-2013
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¿Qué te puedo dejar,
¿Por qué eso ahora?
cuando me vaya
-Hoy estás aquí-
hacia el silencio
lleno de vida
a poblar luceros?
-Otoño placentero-
sino todo mi amor
-Amor crece, seduce-
y los te quiero,
que me enamoran
como mi mar,
como mis olas
su inmensidad, su playa.
Mi espuma implora
Los besos, mi ternura
caricias con las mías
en su atalaya,
otean las almas
mi calor, luz surcada
de deseos, dulzura
por veleros,
y anhelos
mis ojos con
luces de cielo
sus tiernos aguaceros,
rocíos de entrega al alba,
la brisa, mi cantar,
tu voz que aclama,
que no desmaya.
Siempre presente
En este adiós
- Que es un “hola”-
mecido por el viento
bailando vals. Hoja que
se sonríe
-es agridulce-
la parca placentera
en tu desafío
con risa de jazmines
quiebra al destino
y amapolas
olor a vida.
También te dejo
¡Dámelo ahora!
todo el sentimiento
-perla que llora-
de mi amor convertido
y se transforma
en primavera
pintando sus colores
surcando el mar
mirando a proa
en dulce barcarola
para cantar.
Antonio EScobar Mendívez
Nieves Mª Merino Guerra
17-09-2013
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